Desde hace 20 años, el Club Atlético Atlanta, vivía una de las situaciones más tristes de su historia.
Un día de Septiembre, dijeron que el Bohemio entraba en la quiebra y perdería absolutamente todo. A partir de ese momento, nada sería lo mismo.
Meses después, pudo saldar aquellas deudas que la "Mano Negra" de delincuentes internos, se llevaron y vaciaron todo lo que tenía que ver con el club.
El pago de la deuda, correspondía vender la Sede Social, patrimonio de una identidad de varias generaciones de Bohemios. Cuando la noticia de la venta llego a oídos de los hinchas, un manto de tristeza, dolor y angustia, golpeaba aquellos corazones. Muchos lo vivieron por dentro y ver como aquella "segunda casa", se cerraba para siempre antes los ojos de propios y extraños. Ese orgullo que maravilló a vecinos que no eran hinchas del club, moría para siempre.
Los años pasaron, y entramos en el nuevo milenio. La Sede, era un montón de nada. Con perdón de todos, parecía un "aguantadero".
Sin embargo, hubo una persona que plantó la semilla: se trataba de Don Ludovico Nizzardo que junto con su señora y sus hijos Mario y Monica mas las subcomisiones que los Domingos en lugar de estar con sus familias se reunian en las plazas y parques juntando firmas por la recuperacion de la sede, ellos fueron los pilares fundamentales de toda esta movida y marcaron el rumbo para la recuperacion definitiva, fueron los pioneros de luchar hasta el cansancio, por recuperar a "su amor" y para la posteridad, esa bandera que flameaba (y ondeará), en cada partido: "IGUALDAD ANTE LA LEY PARA NUESTRA SEDE". Los años seguían pasando...
Hace un par de años atrás, la agrupación "Nuevo Atlanta", comenzó a realizar trabajos para mejorar las instalaciones. El reultado, Atlanta recibía el primer comodato por parte del Gobierno de la Ciudad para una parte de la Sede. Hoy los trabajos, están al alcance de todos, y se llevan a cabo, algunas actividades deportivas, como Futsal, FEFI, Karate, patín, entre otras.
Luego de más de veinte años de "partidos infinitos", Atlanta jugaba su último partido. Una final, podríamos decir. Fué en la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, con varios representantes en nombre del club. El resultado: un abrumador 50 votos a favor y 2 abstenciones. Así, el Club Atlético Atlanta, ganaba el partido más importante de toda su historia: la recuperación total del patrimonio Bohemio.
Tál es así, que el día de ayer, después del partido de Atlanta ante Flandria, se realizó en las instalaciones del Centro Cultural "Los Bohemios-Osvaldo Miranda", un brindis que contó con la presencia de algunos integrnates de la Comisión Directiva, entre ellos el presidente Alejandro Korz; parte de la agrupación "Nuevo Atlanta", integrantes de la Comisión del Centro Cultural "Los Bohemios-Osvaldo Miranda", personal de la Administración, entre ellos la señora Nely (testigo presencial de aquella triste jornada), y periodistas, entre los que se encontraba un equipo de "Manicomio Bohemio".
El orador de la velada, fué Julio Winnicki, quien se mostró muy emocionado por este hecho trascendental e histórico para el club.
Hoy es un hecho. Atlanta jugó más de 20 años, uno de los partidos más dificiles de su historia. Lo ganó por su gente, y por las obras que hoy son una realidad. Siempre hay un "se puede", y eso fué con el esfuerzo de todos.
Atlanta ganó su partido más importante, y lo festejó en nombre de todo el club.
LUIS LORENZO TELECHEA (DEDICADO A LA MEMORIA DE LUDOVICO NIZZARDO. FIEL HINCHA BOHEMIO Y PIONERO DE INCANSABLE LUCHA POR LA SEDE).